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Mormones y Sola Fide 3. Caer de la gracia.


El tiempo pasa muy rápido, en su día me propuse hacer tres artículos sobre este tema y tras escribir los dos primeros, han pasado dos años para escribir el último, pero me gusta acabar lo que empiezo y por ello quiero escribir este.

Creo haber demostrado con la Biblia que la doctrina de la Sola Fide es incorrecta, ya que en mi primer artículo decía que ninguna de las palabras o enseñanzas de Jesucristo la mencionan ni la explican, más bien todo lo contrario, algo tan extraño para la gran importancia que parte de los cristianos conceden a dicha doctrina. Aún en mi segundo artículo pude demostrar que la mayoría de las parábolas de Cristo contradicen dicho principio.

No obstante y por recordar algunas ideas al respecto, la doctrina en sí es comprensible en el momento histórico que se produjo, como una reacción de las personas justas que intentaron reformar todos los vicios y errores que se habían implementado en la Iglesia de la época, fruto de la apostasía del sencillo Evangelio que Cristo había enseñado en su Ministerio terrenal.

Ahora bien, ningún reformador manifestó haber recibido ninguna revelación de Dios para avalar sus doctrina o enseñanzas, sino que se basaban en una juiciosa y mejor visión de la Biblia, aunque sin inspiración divina, lo que trajo una gran mejora, pero insuficiente por no ir avalada por la Revelación del Cielo.

Hemos de recordar que somos salvos por la Gracia de Cristo, es decir, nada nos salva sino el poder de la Expiación del Hijo de Dios en nuestra vida, denominada Gracia, y no hay nada que podamos hacer por nosotros mismos, ahora bien, esa gracia tiene un camino de acceso que debemos recorrer y que la Biblia enseña con claridad .... se accede a la gracia mediante la fe y la obediencia, es decir, que solo nos salvamos por la gracia, pero la obtenemos teniendo fe en Cristo y guardando sus Mandamientos.

La errónea interpretación de la Sola Gratia viene de los Escritos de Pablo, que vigorosamente corrigió a los judaizantes, que eran conversos cristianos de origen judío, los cuales, aunque aceptaban el Evangelio, creían que tenían que guardar la ley todavía para salvarse, cosa que Pablo negó, insistiendo en que somos salvos por la Expiación, Gracia, de Cristo y no por la obras de la ley.... de ahí se malinterpretó que las obras no eran necesarias en absoluto, cosa errónea, porque la fe sin obras es muerta y la obediencia a los mandamientos se mencionan muchas más veces en la Biblia que cualquier otro principio.

Eso enseñamos en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que la salvación viene por tener fe en Jesucristo, arrepentirnos, ser bautizados en agua y recibir el don del Espíritu Santo por la imposición de manos, después de ello, perseverar en guardar los mandamientos hasta el fin de nuestra vida mortal.

Y es que un verdadero cristiano no se hace por confesar creer en Cristo en un momento de su vida, ni siquiera en un mes o un año, sino toda una vida de servicio a Dios y al prójimo, porque el verdadero cristiano no es quien declara o confiesa, sino el que se esfuerza en ser como El fue.

Tal como lo expresó Pablo en el capítulo 4 de su epístola a los Efesios.

11 Y él mismo constituyó a unos apóstoles; y a otros, profetas; y a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros;
12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,
13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;


La Iglesia que El organizó está para llevarnos a ser semejantes a El, esa es la clave del cristianismo.

Veamos pues que se enseña en  cuanto a la salvación.  Como podrán comprobar, aunque utilizan pasajes bíblicos, la interpretación es muy sesgada y contradice todo el resto del Evangelio, ya que una simple confesión no suele cambiar una vida, por lo menos en la mayoría.


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¿Cómo puedo ser salvo? ¿Qué debo hacer?

"Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo" (Hechos 16:31). Dios ya ha hecho todo el trabajo. Todo lo que debes hacer es recibir por fe la salvación que Dios te ofrece (Efesios 2:8-9). Confía plenamente solo en Jesús como el pago por tus pecados. Cree en Él, y no perecerás (Juan 3:16). Dios te está ofreciendo la salvación como regalo. Todo lo que tienes que hacer es aceptarla. Jesús es el único camino de la salvación (Juan 14:6).

¿Ha hecho usted una decisión por Cristo por lo que ha leído aquí? Si es así, por favor oprima la tecla “¡He aceptado a Cristo hoy!”

https://www.gotquestions.org/Espanol/como-puedo-ser-salvo.html




Además de lo visto anteriormente, se une una gran pregunta, si esta declaración es, o puede ser, fruto de una emoción humana, es decir, un arrebato o ilusión repentina, ¿es para siempre?

Eso es algo, que por desgracia, no suele ir con la naturaleza humana, tan caprichosa y cambiante como el tiempo climático, tal como Cristo lo expresó en la parábola del sembrador, en la cual, dos de cada tres que aceptan el Evangelio lo olvidan al poco tiempo por aburrimiento, desinterés o por presiones externas o errores personales. (Mateo 13).

Sin embargo, por lógica, para mantener dicha doctrina, hay que mantener la persistencia de dicha salvación, por lo que la siguiente declaración es lógica, pero, en mi opinión, errónea y de escaso cumplimiento.


¿Es Bíblico el concepto de ‘Una vez salvo, siempre salvo’?

La frase ‘Una vez salvo, siempre salvo’ es un modo común que usan los Cristianos para referirse a la enseñanza de la Biblia sobre la seguridad eterna. ¿Puede una persona que llega a poner su fe en Jesucristo perder su salvación?

Mientras muchos Cristianos discuten sobre este tema, la evidencia Bíblica apoya el punto de vista que un creyente no puede perder su salvación. En primer lugar, Romanos 8:1 enseña, “Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús.” Un Cristiano, expresado aquí como una persona “unida a Cristo Jesús”, no puede ser condenado por pecados y no será separado de Dios por la eternidad.

Al final de Romanos 8, hay evidencia aun más fuerte que apoya este punto de vista sobre la seguridad eterna: “Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni el porvenir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación, podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 8:38-39). Si no existe poder en toda la creación que pueda separar un creyente de Cristo, esto indica que la salvación de un Cristiano es eternamente asegurada. 



https://www.gotquestions.org/Espanol/Una-vez-salvo-siempre.html


De hecho, me gustaría preguntar a pastores y clérigos con años de ministerio, cuantos de sus seguidores han sido fieles por mas de diez, veinte o cuarenta años, porque tal como pasa en cualquier iglesia, muy pocos permanecen fieles a través de toda una vida, lo que negaría el principio anterior.

Curioseando en los datos de Ferede, en España hay 1.200.000 protestantes de todas la denominaciones, de los cuales reconocen que se suelen congregar regularmente solo 400.000, es decir un tercio, vamos, como nosotros o la mayoría de iglesias, lo que contradeciría los principios anteriores.








Para finalizar, analicemos lo que la propia Biblia dice de la Gracia, que da un matiz muy interesante a la percepción de la errónea Sola Fide, y es que la Gracia, hay que cultivarla, cuidarla, mejorarla o se puede perder.... veamos algunos pasajes, empecemos porque la Gracia no es incondicional y permanente, se puede caer de ella, es decir, la podemos perder si no seguimos el camino de Cristo, tal como lo expresó Pablo a unos cristianos judaizantes que enseñaban a vivir la ley de Moisés después de aceptar  a Cristo y ello  les hizo caer de la Gracia, al renegar de Cristo.

Gálatas 5


Permaneced, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no volváis otra vez a ser presos en el yugo de esclavitud.
He aquí, yo, Pablo, os digo que si os circuncidáis, de nada os aprovechará Cristo.
Y otra vez vuelvo a testificar a todo hombre que se circuncida, que está obligado a cumplir toda la ley.
Separados sois de Cristo los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído.


Es muy claro y evidente, no hay posible engaño, la Sola Fide y la permanencia en salvación es errónea, hay que seguir a Cristo, si nos alejamos de El o hacemos algo  contrario a su voluntad, caemos de la Gracia y quedamos fuera del alcance de su Expiación.

Ahora bien, existe el arrepentimiento para que volvamos a gozar de las bendiciones de su Gracia, el Señor desea salvarnos y nos perdonará tantas veces como nos arrepintamos, pero  siempre debemos tener fe y obedecer y seguir su Ejemplo.

Veamos algunos otros ejemplo, Pablo exhorta a Timoteo a esforzarse en la gracia,.......si la Gracia es absoluta, incondicional y permanente,... ¿cómo puede uno esforzarse en ella?

2 Timoteo2

Así que tú, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús.


Solamente porque nosotros crecemos gracia por gracia cada día de nuestra vida como  cristianos, día a día, por toda una vida.

Ahondando más en este principio, Pablo amonesta a perseverar y a retener la palabra para mantener la salvación.

1 Corintios 15


Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis;
por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano.
Aun Pablo insiste en cómo entrar en la gracia y mantenerla por la  esperanza,  esperanza que nos da firmeza... muy interesante.

Romanos5

por medio de quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.


También nos pide Pablo que cuidemos la salvación.... ¿por qué cuidar algo que no se puede perder?

Hebreos 2

¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo comenzado a ser publicada por el Señor, nos ha sido confirmada por los que oyeron,


Es claro que la salvación es por la Gracia, pero que a ella se accede por la fe y la obediencia y se puede perder si no se cuida  con una vida de sumisión a Cristo y a su voluntad, por lo que se nos exhorta a cuidarla, retenerla, esforzarnos, en resumen, vivir el Evangelio de Cristo, para permanecer en su Gracia, que es la única que salva, pero que debemos guardar y cuidar hasta llegar a ser semejantes a Cristo.

Para finalizar, y aunque hay muchas más citas, una muy clara, la invitación a labrar nuestra propia salvación, no por nuestros méritos, sino por seguir a Cristo y obedecer sus mandamientos.

Filipenses 2

12 Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, labrad vuestra salvación con temor y temblor;




Mormones y Sola Fide 2. Parábolas.



Retomando el tema de la Salvación y de la forma que podemos obtenerla, vuelvo a hablar sobre la Sola Fide, o doctrina que indica que solamente por la fe, sin ningún acto adicional, es decir, con la mera confesión o creencia, es suficiente, lo cual, creo es un concepto erróneo,  y quiero, desde este artículo, y con el mayor de los respetos a los que creen en ello, analizar por segunda vez este tema e intentar, a la luz de la Biblia, averiguar si es correcto o no, mediante un análisis bíblico, y reitero, con el mayor de los respetos.

Quiero recordar que nosotros, como Santos de los Últimos Días, creemos que solamente somos salvos por la Gracia de Cristo, pero que accedemos a esta por medio de la fe y de la obediencia a los mandamientos de Dios, tal como publiqué...

http://mormondefender4biblia.blogspot.com.es/2014/04/los-mormones-y-la-gracia.html


Pero tenemos que entender, que éste, aunque un Don gratuito e inconmensurable, necesitamos hacer nuestra parte para acceder a El, de ahí que, la fe, vaya unida a la obediencia, tal como publiqué...

http://mormondefender4biblia.blogspot.com.es/2014/05/mormones-salvos-por-fe-o-por-obras.html


En la Conferencia General del pasado 5 de abril, el Apóstol Uchtdorf lo expresó de forma magistral con estas palabras...

¿Entendemos nuestra deuda con el Padre Celestial y rogamos con toda nuestra alma por la gracia de Dios?
Cuando nos arrodillamos a orar, ¿es para repasar los grandes éxitos de nuestra propia rectitud o para confesar nuestras faltas, suplicar la gracia de Dios y derramar lágrimas de gratitud por el asombroso plan de redención?25.
No podemos comprar la salvación con las monedas de la obediencia; es la sangre del Hijo de Dios lo que la compra26. Pensar que con nuestras buenas obras podemos pagar por la salvación es como comprar un pasaje de avión y pensar que somos dueños de la línea aérea; o pensar que por pagar el alquiler de nuestra casa, somos ahora los propietarios de todo el planeta.


Queda claro que, no somos salvos por las obras, pero sin las obras y la obediencia, no podemos salvarnos, porque las necesitamos para acceder a la Gracia Salvadora de Nuestro Señor Jesucristo.

Entrando ya en materia, analicemos las Parábolas....

He estudiado muchas veces las Parábolas de Jesús, y las he vuelto a repasar para la preparación de esta entrada y no encuentro NI UNA SOLA PARÁBOLA, que puede defender el principio de la Sola Fide, ni una. Y teniendo en cuenta que Cristo las usó abundantemente para sus enseñanzas, deberíamos encontrar alguna para ilustrar este importante principio.

Por el contrario, hay varias que enseñan lo opuesto a esta doctrina, voy a citar primero las tres que para mi son las mas importantes para nosotros hoy en día, y se encuentran registradas en el capitulo 25 del Evangelio de San Mateo.

Como ya saben, en el capitulo anterior, el Señor respondió a sus discípulos sobre su Segunda Venida a la Tierra y le dijo las señales que lo indicarían, pues bien, cuando terminó de enseñar sobre las señales, les refirió tres parábolas para ilustrar cómo deberíamos prepararnos para su Segunda Venida.

Fijense que todas ellas empiezan diciendo sobre el Reino de los Cielos.... no hay duda pues, que se refiere a la salvación eterna.

1º.-  Parábola de las Diez Vírgenes (Mateo 25: 1-13).  Aquí se ilustra un principio, y es el de la preparación, debemos prepararnos para hacer las cosas, no podemos improvisar, la salvación no se consigue en un minuto, sino en una vida dedicada y en un discipulado sincero a Cristo.

2º- Parábola de los Talentos (Mateo 25: 14-30). Aquí la enseñanza reside en cultivar los dones y habilidades que Dios nos ha concedido y conseguir progreso, puesto que venimos a la tierra a desarrollar nuestras habilidades celestiales, además de compartirlas con los demás.

3º.- Parábola del Juicio de las Naciones (Mateo 25: 30-46). Aquí se ilustra el principio del servicio, del amor y de la compasión por nuestros semejantes, que, como Hijos de Dios, y hermanos nuestros, necesitan de nuestro amor y servicio.

De modo que vemos tres parábolas preparatorias para recibir a Cristo y poder entrar en su Reino y en ellas aprendemos preparación, progreso y servicio, todo ello relacionado con la fe en Cristo y con las obras de justicia, todo principios activos, principios que requieren trabajo y poder, nada que ver con una simple declaración de intenciones.

Para finalizar, la Parábola que mas contradice el principio de la Sola Fide, y que, afortunadamente, es de las pocas que Cristo mismo enseñó y luego explicó, nos muestra como la sola declaración de Fe es insuficiente para acercarnos a la Gracia Redentora.

En Mateo 13 podemos leer la Parábola del Sembrador, en los versículos 1 al 9, como el Señor comparte la Parábola, no lo voy a explicar por no alargarme, pero sabemos que la semilla es sembrada en varios lugares y el resultado es diferente en cada ocasión.

En la explicación de esta parábola, Cristo nos enseña el significado de la misma, versículos 18 al 23

18 Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador:
 19 Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo y arrebata lo que fue sembrado en su corazón; éste es el que fue sembrado junto al camino.
 20 Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra y de inmediato la recibe con gozo.
 21 Pero no tiene raíz en sí, sino que es temporal, y cuando viene la aflicción o la persecución por la palabra, en seguida se ofende.
 22 Y el que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra; pero el afán de este mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
 23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y el que da fruto; y da uno a ciento, y otro a sesenta y otro a treinta por uno.

Es evidente que la semilla es la palabra de Dios sembrada en los corazones de todos los hijos de los hombres, (Lucas 8: 11) y la tierra somos nosotros, quizás mejor diría, la tierra es nuestra fe, porque según la fe que ejerzamos, así brotará la palabra en nuestros corazones para conducirnos a Cristo, a su Gracia y a su Reino Eterno.

En la narración que se hace en el Evangelio de Lucas hay varios matices que son interesantes, en el versiculo 12 habla de Salvación, en el 13 dicen que por un tiempo creen, pero no duran y en el 15 que la salvación da fruto con paciencia.

Como vemos, hay tres tipos de corazones, el que recibe con fe y alegría,  pero no es constante y pronto se aburre o cansa de todo, por lo que no pueda dar fruto.  El segundo es aquel que recibe con fe, pero poco a poco, los pesares, aflicciones y maldades del mundo, van ahogando y malogrando su fe.  Y tercero, aquellos que, a pesar de sufrir lo mismo que los dos anteriores, atesoran la palabra, y a pesar de sus debilidades, dan fruto conforme a su capacidad.

Yo entiendo dos cosas... primero, que cualquiera que tenga buena tierra y dé frutos conforme a su potencial es aceptado por Dios y gozará de Vida Eterna, ya que ha ejercido una fe poderosa, una fe activa que con la obediencia y purificación, se afianza en tierra y se libra de malas hierbas y da un buen fruto, la Salvación Eterna.

Por otro lado, veo que la palabra entre pedregales, en principio es sincera, es decir, cree, tiene fe, pero no es constante, por lo tanto no ejerce fe y obediencia y termina muriendo, esto, amigos, amigas, es el principio de la Sola Fide, un principio imposible de  llevarnos a la Salvación y un principio que vemos, no es Bíblico.

Ahora, hermanos, hermanas, lean, mediten y juzguen por sí mismos.

Un abrazo en Cristo.










MORMONES Y SOLA FIDE 1ª, Las palabras de Cristo.



Estimados amigos,

En esta ocasión quiero retomar un tema que debería haber continuado hace tiempo y que da para muchas entradas, y ahora, quiero volver a comentar de forma mas extensa en varios artículos

Quiero destacar, que en absoluto es mi intención ofender o criticar ninguna creencia o religión, sino mas bien, al amparo de la Historia y de la Biblia, intentar aclarar algunos principios que pueden ser errados, y por los cuales, los Santos de los Últimos Días no nos guiamos. A pesar de que se nos tilde de no cristianos, precisamente por no creer en estos principios doctrinales. En mi opinión, la cual trataré de justificar con las Escrituras, no están en la Biblia, tal como algunos las interpretan. Por lo que pido disculpas si puedo herir alguna sensibilidad, no es mi intención, no juzgo personas, solo analizo ideas, al amparo de la Biblia.

Quiero recordar que los Mormones creemos que somos salvos por la Gracia de Jesucristo, tal como lo expuse el año pasado en una entrada

http://mormondefender4biblia.blogspot.com.es/2014/04/los-mormones-y-la-gracia.html


Asimismo, igual que pasa con la Trinidad, creemos en ello pero de una forma diferente, por lo que creyendo que somos salvos por la Gracia de Cristo, diferimos en la forma de acceder a esa Gracia, puesto que obtenemos esa Gracia Redentora por medio de la Fe y de la Obediencia, tal como relaté en otra entrada

http://mormondefender4biblia.blogspot.com.es/2014/05/mormones-salvos-por-fe-o-por-obras.html

Visto esto, pasemos a hablar del principio de la Sola Fide, principio básico de la Reforma y que de forma sencilla, vendría a ser esto....según la wikipedia.

Sola fide (“Solo por la fe Dios salva”)[editar]

Sola fide es la enseñanza que dice que la justificación (interpretada en la teología protestante como “ser declarado justo por Dios”, y se asume que significa “salvación”) se recibe sólo por la fe, sin ninguna mezcla ni necesidad de buenas obras, aunque en la teología protestante clásica, la fe salvadora siempre se evidencia por las buenas obras. Algunos protestantes ven esta doctrina resumida con la fórmula “la fe produce justificación y buenas obras” y contrastada con la fórmula católico-romana “fe y buenas obras producen justificación”.
Romanos 1:17 Nueva Traducción Viviente (NTV)
“Esa Buena Noticia nos revela cómo Dios nos hace justos ante sus ojos, lo cual se logra del principio al fin por medio de la fe. Como dicen las Escrituras: «Es por medio de la fe que el justo tiene vida»”.

Soy consciente de mi ignorancia en muchos aspectos de esta doctrina, porque no le he vivido ni practicado, pero hasta donde me he documentado, tanto por la lectura de ministerios apologéticos, como por escuchar la radio protestante o incluso conversar y debatir con hermanos de esa fe, espero no comentar nada que no sea realmente cierto. Estoy dispuesto a corregir cualquier opinión que no sea cierta, según desee cualquier persona opinar sobre este artículo.

No obstante, y como creo haber demostrado en los dos artículos anteriores indicados, la sola fide no es una doctrina bíblica y ahora quiero agregar unos datos que son realmente demoledores.

En todo lo que he estudiado al respecto, NO HAY UNA SOLA PALABRA DE CRISTO QUE RESPALDE ESTA DOCTRINA, es decir, que toda la interpretación biblica viene de las palabras de los Apóstoles de Cristo, pero no de El mismo.... ¿qué significa?

A mi entender, significa que Cristo nunca enseño que la fe únicamente nos salva, sino que El es nuestro Salvador y Redentor y que, por supuesto, tenemos que creer en El y seguirlo, que ahí está la clave, creer y vivir, fe y obras, creer y obedecer, pero para acceder a su gracia, no para salvarnos, porque sólo El salva, tal como relata en Juan 3: 16-20, que es el único texto que podría confundirse con esta doctrina, pero que si se lee completo y se leen el resto de las Palabras de Jesús, veremos que es imposible que se refiriera a la Sola Fide.

De hecho, en la mayor parte de sus enseñanzas nos indica que tenemos que creer en El, ejercer la fe y obedecer todos sus Mandamientos para que su Gracia nos pueda salvar.

Si tan solo repasamos uno de los mayores discursos del Maestro, el denominado Sermón del Monte, que podemos encontrar en los capitulos 5 al 7 de Mateo, veremos que en todos ellos, se esta refiriendo a los Mandamientos y a su obediencia, como camino a la Vida Eterna.




Incluso, al final del mismo, una escritura clave que derrumba la Sola Fide se puede leer en Mateo 7

20 Así que, por sus frutos los conoceréis.

21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

Es evidente que el Señor siempre hablaba de hacer, de vivir, de crecer, nunca de una mera declaración de creencia, sino toda una vida de fe, creer, obedecer a Dios y servir al prójimo, a fin de poder volver a su Presencia y vivir con El, osea, obtener la Vida Eterna.

El error histórico, creo que comprensible, viene de una época en que solo se valoraban las obras y únicamente con el pago de indulgencias se obtenía la Salvación, cosa ilógica y que los Reformadores rechazaron, pero para justificarlo, usaron algunas escrituras de los Apóstoles, la cuales dirigían a judíos conversos, en las que resaltaban la importancia de la fe en Cristo sobre las Obras de la Ley. y de ahí, según mi opinión, se creó todo este gran error de interpretación bíblica.

De hecho, y como ejemplo para no alargarme mas con esta entrada, hay una historia muy significativa que podemos leer en Mateo 19, la historia del joven rico, veamos que le preguntó el joven al Maestro y cual fue su respuesta, es muy significativo....

16 Y he aquí uno, acercándose, le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna?

17 Y él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno sino uno, a saber, Dios; y si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos.

No hay duda de la pregunta y menos de la respuesta, Cristo no le dijo, cree en mi Solamente, declara que soy el Maestro.... nada, en absoluto, le dijo sencillamente... "guarda los mandamientos" , y es lógico porque su fe ya se la estaba mostrando al preguntarle el camino, el joven tenia fe, y Cristo le dijo lo que le faltaba, obediencia a los Mandamientos.

Luego la historia continua

18 Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás; no cometerás adulterio; no hurtarás; no dirás falso testimonio;
 19 honra a tu padre y a tu madre; y, amarás a tu prójimo como a ti mismo.
 20 El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta?
 21 Le dijo Jesús: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
 22 Y al oír el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

En este momento, vemos como Cristo le invitó a hacer algo mas, porque la fe y la obediencia son los principios básicos para acceder a la Gracia Salvadora, pero luego el Señor nos pide algo mas, según nuestras cualidadaes y capacidades, algo que tiene que ver con la Santificación y la Purificación, para poder estar limpios y puros algún día en su presencia.

Pero esta claro que, en las enseñanzas del Maestro, daba prioridad a la obediencia sobre la mera creencia o declaración de fe, esa es la verdadera fe, fe viva que dicen algunos, y que nos lleva a la Gracia Redentora de nuestro Señor Jesucristo.

En próximas fechas publicaré dos artículos mas sobre la Sola Fide, su relación con las obras y la posibilidad de caer de la Gracia, que complementaran mejor las ideas que acabo de exponer.

Espero les haya gustado y siéntanse libres de comentar lo que deseen.