La Biblia es verdadera, igual que el Libro de Mormón, ambos son registros sagrados, palabra de Dios y, a la vez, registros históricos de pueblos que vivieron en la antigüedad.
Sin embargo a los críticos de la Iglesia de Jesucristo, se les llena la boca diciendo que no hay pruebas históricas ni arqueológicas del Libro de Mormón y sí de la Biblia, no consideran dos cosas muy importantes.
Primera, que el Libro de Mormón tiene muchas evidencias de su autenticidad histórica, yo he publicado docenas de artículos incuestionables que prueban la historia y la arqueología del Libro de Mormón.
Segundo, la Biblia solo está probada PARCIALMENTE, en su historia y arqueología, hay muchas pruebas, pero solo a partir del siglo IX antes de Cristo, por lo que los reyes, los jueces y el Exodo, entre otros episodios bíblicos no tienen sustento histórico, hasta hoy dia.
De hecho, muchos ateos críticos con la Biblia, acusan a ésta de plagio de otras culturas mesopotámicas, como la copia de la ley mosaica del Código de Hammurabi, o la historia del Génesis como copia de poemas tales como Enuma Elish o el Poema de Gilgamesh.
Yo creo en la Biblia, en la Biblia completa hasta donde la tenemos actualmente y el Libro de Mormón, creo que ambos son Escritura Sagrada y registros antiguos, y que, con el tiempo, se irán encontrando las pruebas que lo demuestren completamente.
Es por lo que hoy les quiero acompañar un hermoso artículo que nos da evidencia lingüistica de la estancia del pueblo de Israel en Egipto.
Espero que lo disfruten.
Los que creemos en la inspiración de la Biblia o del Libro de Mormón no necesitamos pruebas sobre sus veracidades. Es el Espíritu de Dios que testifica de estas verdades. Pero también es bueno, cuando tenemos pruebas, poder compartirlas con nuestra familia, amigos, alumnos u otras personas que indaguen. Debemos responder con cariño a las preguntas que recibamos:
El élder M. Russell Ballard indicó, “Atrás quedan los días en que un alumno hacía una pregunta sincera y el maestro respondía: ‘¡No te preocupes por eso!’ Atrás quedan los días en que un alumno expresaba una preocupación sincera y el maestro compartía su testimonio como respuesta para no hablar del asunto’… Una forma de saber qué preguntas tienen sus alumnos, es escucharlos con atención… sus alumnos también tienen que ser bendecidos al aprender el contenido y contexto doctrinal o histórico por medio del estudio y de la fe, acompañado de un testimonio puro para que puedan experimentar una conversión madura y perdurable al Evangelio, y un compromiso de por vida con Jesucristo”.[1]
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días está tomando importantes pasos para dejar todo documentado lo mejor posible en cuanto al Profeta José Smith y la restauración del Evangelio de Jesucristo, en los tomos Joseph Smith Papers. Existen muchas preguntas, también, en cuanto a la Biblia y su veracidad.
Hay un gran número creciente de eruditos que han estado atacando a la Biblia. Por ejemplo, algunos sugieren que el pueblo de Israel cruzó el Mar de Cañas (que no es muy profundo) en vez del Mar Rojo al escapar de Egipto. Otros, más extremistas aun, sostienen que el pueblo de Israel nunca vivió en Egipto. Si la Biblia muestra un milagro, ellos tratan de eliminarlo. Es por eso, que comenzando con Wellhausen, han desarrollado lo que se llama la hipótesis documentaria, o documentary hypothesis (DH) en inglés.
Es muy interesante, y triste, ver la sutileza con que vemos estos cambios. Por ejemplo, hace unas décadas se veían estos nuevos pensamientos al pie de la página de la Biblia; más recientemente las creencias tradicionales pasaron al pie de la página y las nuevas creencias las han reemplazado en el texto; y finalmente, hoy en día; sólo quedan las nuevas creencias sin ni siquiera una anotación al pie de la página en cuanto a las creencias tradicionales.
Mientras que en el pasado se suponía que los relatos de la Biblia eran verídicos a no ser que alguien mostrara lo contrario; hoy en día los que atacan la Biblia han dicho que los creyentes deben demostrar su veracidad con hechos. [2] He visto estas evoluciones de criterios y prácticas durante mi propia vida.
¿Existe alguna prueba de que el pueblo de Israel realmente vivió en Egipto?
Israel en Egipto
Recientemente, un erudito judío y rabino ortodoxo, Joshua Berman, [2] ha despertado el entusiasmo de tanto los creyentes judíos como cristianos en cuanto a su defensa de la Biblia, con algunos hallazgos bastante interesantes, por medio de un ángulo inesperado. Berman es el primero en reconocer que por el momento no existen hallazgos arqueológicos que prueben la estadía del pueblo de Israel en Egipto. Si bien es verdad que Goshen, el lugar donde vivieron los israelitas en su estadía en Egipto, está sumergido, Berman prefiere utilizar otros argumentos. El rabino encontró varias pruebas, las que se encuentran dentro de la misma Biblia.
Básicamente, estas pruebas muestran, por medio del lenguaje en la Torah, que efectivamente el pueblo de Israel vivió en Egipto. Berman insiste que el pueblo de Israel estaba empapado con la cultura egipcia y lo demuestra en varias formas. Por ejemplo, en el libro de salmos vemos la expresión “con mano fuerte y brazo extendido” (Salmos 136:12, בְּיָ֣ד חֲ֭זָקָה וּבִזְרֹ֣ועַ נְטוּיָ֑ה). Esta escritura, en su pleno contexto, habla de la mano poderosa del Señor que sacó a Israel de Egipto (ver también Salmos 136:10–15, sobre los detalles del éxodo).
Mientras que esta frase pudiera usarse en muchas situaciones, en el Antiguo Testamento sólo se ocupa en relación al éxodo. ¿Y por qué es tan interesante? Lo es ya que justamente en la historia de Egipto de ese tiempo, explica Joshua Berman, “que cuando lea las inscripciones egipcias, especialmente durante el reino nuevo [la época asociada con el éxodo] … atribuyen casi todo lo que hace el faraón a su ‘mano fuerte y brazo extendido’. Se encuentran docenas y docenas de tales inscripciones.
Viéndolo de otra manera, la Torá se ha apropiado de la retórica de los faraones en un relato en contra de los faraones [o sea, el relato bíblico del éxodo—GB].” Berman nos asegura de que esta expresión no es ni algo típico entre las naciones antiguas de ese tiempo ni tampoco dentro de Egipto en otros tiempos. [2]
Viéndolo de otra manera, la Torá se ha apropiado de la retórica de los faraones en un relato en contra de los faraones [o sea, el relato bíblico del éxodo—GB].” Berman nos asegura de que esta expresión no es ni algo típico entre las naciones antiguas de ese tiempo ni tampoco dentro de Egipto en otros tiempos. [2]
Es, entonces, un tipo de huichipirichi [3] en contra del abuso recibido de parte de los egipcios durante el cautiverio de Israel en Egipto. Es por eso que la expresión tiene aun más fuerza de lo pensado.
Los egipcios de ese tiempo pensaban que los faraones todo lo podían todo pero los israelitas dejaron claro que no podían en contra del Santo de Israel. Todo esto fue aun más potente para los israelitas, al apropiarse de esta expresión usada por sus opresores. [2]
Sólo incluiré un ejemplo más de varios. En cuanto a las plagas de granizo y de langostas, se usa una expresión parecida. “… tan grande cual [fue el granizo que] nunca hubo en toda la tierra de Egipto desde que fue habitada” (Éxodo 9:23). Una vez más, Joshua muestra que esta expresión es interesante porque ocurre sólo en relación con la estadía de los israelitas en Egipto y porque es una expresión usada constantemente en esa época para loar a los faraones. [2] Viene siendo, entonces, otro huichipirichi.
Entonces, explica Joshua Berman, aunque todavía no se han encontrado hallazgos arqueológicos que demuestren que realmente el pueblo de Israel vivió en Egipto, sí existen estas pruebas idiomáticas en la misma Biblia. [2]
Más ejemplos del huichipirichi
Veamos otro ejemplo Bíblico en cuanto a los desaires. A través de los capítulos 36 y 37 de Isaías, los siervos de Senaquerib, el Rey de Asiria, se burlan de los Israelitas y de Jehová en la forma más terrible. En respuesta, por medio del profeta Isaías, el Santo de Israel consoló a su pueblo y se burló de Senaquerib: “Porque tu furor contra mí y tu arrogancia han subido a mis oídos, pondré, pues, mi argolla en tu nariz, y mi freno en tus labios y te haré volver por el camino por donde viniste” (Isaías 37:29).
O sea, el Santo de Israel guiaría a Senaquerib hacia su fracaso como a un toro o buey que se maneja por medio de una argolla en su nariz; o a un caballo que se domina por medio de un freno en su boca. Senaquerib sería tan impotente como un buey o un caballo dominado.
Conclusión
Hoy en día vemos idolatría intelectual o filosófica en contra de la Biblia y del Libro de Mormón. No hace mucho que los eruditos decían que no existió el Rey David, sino que era un mito Bíblico. Pero cada década va desenterrando más hallazgos que prueban que el Rey David existió. Inclusive, ya se ha excavado lo que es la Ciudad de David en Jerusalén. Junto con mi esposa vimos esto en nuestro viaje a la Tierra Santa. Cada día hay más pruebas sobre la veracidad de la Biblia y del Libro de Mormón y llegará el tiempo en que estas pruebas serán innegables.
Pero ninguna prueba es tan potente como la del poder testificador del Espíritu Santo.
[1] Las oportunidades y responsabilidades de los maestros del SEI en el siglo XXI. Élder M. Russell Ballard. Para los maestros de religión del SEI • 26 de febrero de 2016 • Tabernáculo de Salt Lake.
[2] Podcast: Joshua Berman on Whether the Exodus Really Happened, 10 de abril de 2019. URL: https://tikvahfund.org/library/podcast-joshua-berman-on-whether-the-exodus-really-happened/
Las Escrituras son verdaderas.
ResponderEliminarRazones para confiar en la Biblia
Eliminar1. Exactitud histórica
Sería muy difícil fiarse de una obra que tuviera inexactitudes. Imagínese que un libro de historia moderna situara la segunda guerra mundial en el siglo XIX o que llamara rey al presidente de Estados Unidos. ¿No minaría esto su credibilidad?
NADIE jamás ha podido demostrar que la Biblia sea inexacta en materia histórica. Los personajes y los sucesos de los que habla son reales.
Personajes.
La crítica puso en duda la existencia de Poncio Pilato, el prefecto de Judea que entregó a Jesús para que lo colgaran (Mateo 27:1-26). Una prueba de que Pilato gobernó Judea es la inscripción grabada en un bloque de piedra descubierto en 1961 en la ciudad portuaria de Cesarea, a orillas del Mediterráneo.
Antes de 1993 no había prueba externa que sostuviera la historicidad de David, el valeroso y joven pastor que llegó a ser rey de Israel. Pero aquel año se desenterró en el norte de Israel una estela de basalto que databa del siglo IX antes de nuestra era y que, según los expertos, tenía grabadas las palabras “casa de David” y “rey de Israel”.
Sucesos.
Hasta hace poco, muchos eruditos dudaban de la exactitud del relato bíblico sobre la lucha que libró Edom contra Israel en tiempos de David (2 Samuel 8:13, 14). Argumentaban que Edom era un simple pueblo de pastores que en aquella época aún no tenía ni el poder ni la organización suficientes para suponer una amenaza contra Israel. Sin embargo, las últimas excavaciones indican que “Edom era una sociedad desarrollada siglos antes [de lo que se creía anteriormente], tal como describe la Biblia”, afirma un artículo de la revista Biblical Archaeology Review.
Títulos correctos.
Durante los dieciséis siglos que tardó en redactarse la Biblia, hubo muchos gobernantes en el mundo. Cada vez que la Biblia se refiere a un gobernante, le da el tratamiento correcto. Por ejemplo, a Herodes Antipas se le llama acertadamente “gobernante de distrito”, y a Galión, “procónsul” (Lucas 3:1; Hechos 18:12). Esdras 5:6 dice que Tatenai era el gobernador de la provincia persa de “más allá del Río”, el Éufrates, y una moneda acuñada en el siglo IV antes de nuestra era lleva una inscripción similar, que indica que el gobernador persa Mazaeus estaba al frente de la provincia de “más allá del Río”.
La exactitud en lo que parecen ser detalles sin importancia no debe tenerse en poco. El hecho de que los escritores bíblicos demostraran ser confiables aun en tales detalles sin duda refuerza nuestra confianza en todos sus escritos.
REPETIMOS.NADIE jamás ha podido demostrar que la Biblia sea inexacta en materia histórica. Los personajes y los sucesos de los que habla son reales. ¿Sucede lo mismo con los personajes,lugares, sucesos en fechas y nombres con el LDM?.Solo son "verificados" por los mormones.¿Puede ustedes corraborar por fuentes externas no mormonas la historicidad del LDM?.
EliminarDespués de haber sido bautizado y recibir las bendiciones del Espiritu Santo,he comprendido y aceptado que La Santa Biblia,El Libro de Mormón, Doctrinas y Convenios y La Perla de Gran Precio,son Escrituras Sagradas que fueron reveladas a los siervos escogidos,por El Señor Jesucristo,para que las proclamaran a todo el genero humano,para la salvación de sus almas.
ResponderEliminar������, La Biblia el palo de Juda'. �� Y el Libro de Mormon el palo de Jose'. ������ lo dice Ezeq.37:15-20.
ResponderEliminarJehová le dio a Ezequiel un mensaje de esperanza: prometió que unificaría a la nación de Israel cuando esta regresara a la Tierra Prometida después del cautiverio. Con este mensaje, también profetizó la unificación que el pueblo de Dios experimentaría en los últimos días.
EliminarJehová le pidió a Ezequiel que escribiera algo en dos palos. En uno, debía escribir: “Para Judá y para los hijos de Israel sus socios”, y en el otro: “Para José, el palo de Efraín, y toda la casa de Israel sus socios”. Los dos palos llegarían a ser “uno solo” en la mano de Ezequiel (Ezeq. 37:15-17).
¿Qué simboliza “Efraín” en esta profecía? Jeroboán, el primer rey del reino de diez tribus del norte, pertenecía a la que llegó a ser la tribu dominante: Efraín (Deut. 33:13, 17; 1 Rey. 11:26). Como su nombre indica, esta tribu provenía de Efraín, el hijo de José (Núm. 1:32, 33). José recibió una bendición muy especial de su padre, Jacob. Por eso, era apropiado que el palo que representaba este reino de diez tribus se llamara “el palo de Efraín”. En el año 740 antes de nuestra era, mucho antes de que Ezequiel escribiera esta profecía, los asirios conquistaron el reino del norte y se llevaron cautivos a sus habitantes (2 Rey. 17:6). Así que, para cuando Jehová dio esta profecía a Ezequiel, la mayoría de aquellos israelitas estaban dispersados por todo el Imperio babilonio, que había reemplazado al asirio.
En el año 607 antes de nuestra era fueron llevados cautivos a Babilonia los habitantes del reino de dos tribus del sur, junto con los que quizás quedaron del reino del norte. Los reyes de la línea de Judá habían gobernado esas dos tribus, con las que el sacerdocio estaba relacionado, pues los sacerdotes servían en el templo de Jerusalén (2 Crón. 11:13, 14; 34:30). Por lo tanto, era apropiado que el palo “para Judá” representara al reino de dos tribus.
¿Cuándo se unieron estos dos palos simbólicos? En el año 537 antes de nuestra era, cuando los israelitas regresaron a Jerusalén para reconstruir el templo. Representantes del reino de dos tribus y del de diez tribus volvieron juntos del exilio. A partir de entonces, los hijos de Israel ya no estaban divididos (Ezeq. 37:21, 22). Adoraban de nuevo a Jehová en unidad. Los profetas Isaías y Jeremías también habían predicho esta reconciliación (Is. 11:12, 13; Jer. 31:1, 6, 31).
¿Qué verdad importante destaca esta profecía? Que Jehová hará que sus siervos lleguen a ser “uno solo” (Ezeq. 37:18, 19).
los palos de la profecía de Ezequiel no se refieren a libros, y esto lo indica Ezequiel mismo. El designó un palo para Judá y el otro como “el palo de Efraín.” La tribu de Efraín descendió de José y llegó a ser la cabeza de las diez tribus que se separaron en los días del rey Roboam. A causa de esta jefatura el nombre Efraín llegó a ser aplicado al reino de diez tribus. Después que los israelitas fueron librados del cautiverio en Babilonia, las diez tribus se reunieron con las otras dos tribus y los levitas. Esta reunión de los reinos septentrional y meridional de Israel fue lo que predijo Ezequiel cuando habló de que los dos palos llegarían a ser un solo palo. De modo que la Biblia no presta apoyo a la alegación de que algún otro libro religioso es de igual autoridad a ella.
EliminarEl Espíritu Santo testifica en nuestros corazones la verdad de los Libros Sagrados, y que todas estas verdades se están revelando para estos tiempos. Dios vive y Jesús resucitó y está a su diestra y regresará pronto.
ResponderEliminarSi estuvo en Jerusalén viendo la Tierra Santa y todos los descubrimientos y hallazgos bíblicos, también podría hacer otro viaje para visitar algunos pueblos de los Nefitas o lamanitas. Están descritos en el "otro" testamento de Jesucristo.
ResponderEliminarBusquen en esos sitios los restos de la construcción de un barco en el que Dios mandó trasladar a la familia de Nefi. Puede llevar una brújula y viajar al continente americano en busca de nuevos hallazgos. El otro testamento de Jesucristo le servirá de ayuda para encontrar más pruebas las habidas y por haber.
Nice post. I really enjoy reading it. Very instructive, keep on writing.Thanks for sharing.
ResponderEliminarThanks for everything
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